La piscina y el spa del camping se han consolidado en los últimos años como el servicio estrella para atraer clientes no campistas y ayudar a «vender» alojamientos durante todo el año. Y ahora más que nunca, si la oferta de tu establecimiento incluye un espacio acuático bien acondicionado y tratado, podrás contar con una nueva clientela que te ayudará a incrementar la cifra de negocio total del camping.
De hecho, los campings que han tenido sus piscinas abiertas durante el verano han tenido que adaptarse a unos nuevos protocolos, pero no ha habido problemas en estas instalaciones. En general, el usuario ha entendido desde el primer momento las normas y las ha aceptado, y ha valorado el servicio de piscina como un punto a favor a la hora de elegir su destino vacacional. En estos tiempos de incertidumbre, es importante recordar que que una piscina (de verano o cubierta) o una instalación de wellness correctamente tratada es un lugar seguro. ¡
Aspectos higiénico-sanitarios
Alfonso Ribarrocha, socio-director técnico de la firma Action Waterscapes, SL y experto en fabricación y normativa sobre espacios acuáticos, pone en valor algunos aspectos que las piscinas e instalaciones de ocio acuático en general. Así, la calidad del agua de las piscinas de uso público y los parques acuáticos está perfectamente reglamentada (RD742/2013) y las instalaciones están sometidas a autocontroles por parte del gestor y a controles sanitarios externos debidamente vigilados por las autoridades sanitarias. «El control de las piscinas depende, en todas las Comunidades Autónomas, de los departamentos de Sanidad Ambiental de las correspondientes Consejerías de Sanidad. Y, probablemente, las piscinas sean una de las instalaciones de ocio (y deportivas) más controladas desde el punto de vista higiénico-sanitario, debido al estricto control microbiológico reglamentario al que están sometidas», dice.
La propia agencia americana de Control de Enfermedades y Prevención (CDC) ha confirmado que no hay ninguna evidencia de que el COVID-19 se pueda propagar a los humanos a través del uso de piscinas, spas o juegos acuáticos. Una gestión adecuada, el mantenimiento y la desinfección (habitualmente con productos a base de cloro y bromo) normalmente inactiva el virus que causa la COVID-19.
Mantenimiento para evitar la COVID-19
A la hora de hablar de sistemas de desinfección y el tratamiento que debe recibir el agua para asegurar que la piscina sea un lugar seguro. Ignacio González, Sales Manager Piscina Comercial & Wellness de Fluidra Comercial España, nos explica que si se realiza la cloración de la piscina siguiendo las buenas prácticas de tratamiento, se maximiza la seguridad de las instalaciones. «Según la Organización Mundial de la Salud (OMS), una concentración residual de cloro libre de ≥0.5 mg/l en el agua de la piscina durante un mínimo de 30 minutos de contacto a un pH <8.0 es suficiente para matar virus envueltos como los coronavirus», nos dice.
Y recuerda que lo único que debe hacer el camping es mantener los parámetros del agua en los parámetros recomendados por los diferentes organismos oficiales. Para maximizar la seguridad en piscinas de uso público, se recomienda una automatización de las tres fases:
– Regulación del pH: Una correcta regulación del pH entre 7,2 y 7,6 por medio de ácidos o de CO2 es esencial para garantizar una desinfección eficaz.
– Desinfección: Para ampliar el espectro de desinfección se recomienda el uso de luz ultravioleta en combinación con cloro dosificado (en pastillas o liquido) o electrólisis de sal. Es importante también mantener el vaso de la piscina limpio así como los skimmers y mantener el entorno de la misma desinfectado. También, cabe destacar que el entorno de la piscina puede ser un foco de infección por lo que hay que mantener desinfectadas las playas, tumbonas y otras superficies que se encuentren alrededor de la piscina.
– Medición constante: La medición constante de los niveles de pH y de cloro así como la regulación automática de estos parámetros es fundamental en las piscinas públicas. Se recomienda mostrar los resultados de la medición a los usuarios, para que estén plenamente informados de la calidad del agua.
En definitiva, higiene, desinfección y limpieza continua en vasos, barandillas, escaleras, terrazas, vestuarios, y aseos, junto a la profesionalidad del personal de mantenimiento y su formación constantemente actualizada, son una garantía de éxito para el funcionamiento de este tipo de instalaciones.
El entorno de la piscina
¿Y qué pasa con la zona que rodea a la piscina?: también debe ser un espacio en el que prime la comodidad y la seguridad, ya que niños y mayores la recorren descalzos o con los pies descalzos.
En este sentido, la firma JDM Expert España propone el pavimento drenante y antideslizante Hydro’Way como solución que deja pasar el agua a su través y permite que ésta se infiltre por el terreno o sea captada y retenida para su posterior reutilización o evacuación. Este suelo se compone de gravilla 100% natural y su instalación se realiza en cualquier espacio exterior, tanto si quieres hacer una renovación de tu piscina como para obra nueva. Una apuesta más por ofrecer una instalación cuidada y segura a todos los clientes.