Según datos de la FEEC (Federación Española de Empresarios Campistas), el camping ha vivido un verano extraordinario. En la costa Mediterránea (desde Andalucía hasta Barcelona) han presentado niveles de ocupación nunca antes registrados (95%) motivados sobre todo, por la excelente climatología y un éxodo importante de turistas de interior en busca de playa.
Un notable alto para los campings de Andalucía
Los campings de Andalucía han valorado el verano y le han puesto una nota media de 8,5 (en una escala de 1 a 10) y han declarado estar satisfechos con los resultados obtenidos en verano. La mayoría de los campings coincide en ver un aumento en nuevos clientes nacionales, no parece que se haya producido una variación en la distribución entre españoles (80%) y extranjeros (20%). En respuesta a si se ha notado un cambio en la afluencia según tipología de elementos de acampada, se ha notado un ligero aumento en tiendas de acampada, lo cual sería un cambio de tendencia en muchos años.
La temporada alta se adelanta
Históricamente el mes de julio en los campings de Andalucía no «arrancaba» hasta su segunda quincena, pero, este año julio ha empezado a funcionar una semana antes, dejando una ocupación media en parcelas del 64% y en bungalows del 82%. Agosto ha sido de lleno técnico en muchos campings, dejando una media de ocupación del 81% en parcelas y del 90% en bungalows.
En cuanto a las previsiones para lo que queda del año, la mayoría está moderadamente optimista, sobre todo con la constatación de que el turista extranjero está volviendo con reservas en otoño y también en el invierno.
Dificultades en la contratación de personal
Según la Federación Andaluza de Campings, la mayoría de los campings ha reportado problemas en la contratación de personal, que ha afectado a prácticamente todas las áreas, pero especialmente a la hostelería y en menor medida a la recepción, la limpieza y el mantenimiento.