El turismo internacional avanza a buen ritmo hacia la vuelta a los niveles prepandémicos, ya que durante el primer trimestre de 2023 han viajado el doble de personas que en el mismo período de 2022, según la Organización Mundial del Turismo (OMT).
Nuevos datos de la OMT
El segundo Barómetro OMT del Turismo Mundial del año indica que la recuperación del sector prosigue su rápida evolución en 2023. En concreto, ha arrojado las siguientes conclusiones:
- En cifras generales, las llegadas internacionales alcanzaron el 80 % de los niveles anteriores a la pandemia en el primer trimestre de 2023.
- Se estima que, en estos tres primeros meses, 235 millones de turistas hicieron viajes internacionales, más del doble que en el mismo período de 2022.
- El turismo no ha dejado de hacer gala de su resiliencia. Según los datos revisados para 2022, el año pasado hubo más de 960 millones de desplazamientos internacionales de turistas, es decir, se restablecieron dos tercios (66 %) de las cifras prepandémicas.
Recuperación por regiones en el primer trimestre de 2023
- Oriente Medio registró los mejores resultados, ya que fue la única región que superó las llegadas de 2019 (+15 %) y la primera en recuperar las cifras anteriores a la pandemia en un trimestre completo.
- Europa alcanzó el 90 % de los niveles anteriores a la pandemia gracias a la intensa demanda intrarregional.
- África y las Américas llegaron al 88 % y a cerca del 85 %, respectivamente, de los niveles registrados en 2019.
- La región de Asia y el Pacífico aceleró su recuperación al situarse en un 54 % de los niveles prepandémicos, pero se prevé que esta tendencia al alza se intensifique ahora que la mayoría de los destinos, China en particular, han reabierto sus fronteras a los viajes no esenciales.
¿Qué significan estos datos?
En palabras de Zurab Pololikashvili, Secretario General de la OMT: «Este inicio de año ha vuelto a poner de manifiesto la extraordinaria capacidad de recuperación del turismo. En muchos lugares, estamos cerca o incluso por encima de los niveles de llegadas anteriores a la pandemia. Con todo, debemos permanecer alerta ante desafíos que van desde la inseguridad geopolítica, la escasez de personal y la posible incidencia de la crisis del coste de la vida en el turismo, y hemos de velar por que la vuelta del turismo cumpla con sus responsabilidades como solución a la emergencia climática y como motor de un desarrollo integrador».
Los ingresos del turismo internacional volvieron a superar la barrera del billón de dólares en 2022, con un crecimiento del 50 % en términos reales en comparación con 2021, propiciado por el notable repunte de los viajes internacionales. El gasto de los visitantes internacionales alcanzó el 64 % de los niveles prepandémicos (-36 % respecto a 2019, medido en términos reales). Por regiones, Europa obtuvo los mejores resultados en 2022, con casi 550 000 millones de dólares de los EE. UU. en ingresos procedentes del turismo (520 000 millones de euros), lo que supone un 87 % de las cifras prepandémicas. África recuperó el 75 % de los ingresos registrados antes de la crisis de la COVID‑19, Oriente Medio el 70 % y las Américas el 68 %. Como consecuencia de la prolongación del cierre de las fronteras a viajes no esenciales, los destinos asiáticos ingresaron en torno al 28 % de sus valores anteriores a la pandemia.
¿Qué nos depara el futuro?
Los resultados del primer trimestre de 2023 coinciden con los pronósticos de la OMT para ese año, según los cuales las llegadas internacionales recuperarán entre el 80 % y el 95 % de los niveles anteriores a la pandemia. El Grupo de Expertos de la OMT confía en que la temporada alta (de mayo a agosto) dará buenos frutos en el hemisferio norte, como indica el último Índice de Confianza de la OMT, que augura unos resultados aún mejores que en 2022 para este período.
Ahora bien, la recuperación del turismo también tiene algunos desafíos por delante. Según el Grupo de Expertos de la OMT, el principal factor que pesa sobre la recuperación efectiva del turismo internacional en 2023 es la situación económica, habida cuenta de que la elevada inflación y la subida de los precios del petróleo redundan en un aumento de los costes del transporte y el alojamiento. Por ende, es de esperar que los turistas procuren cada vez más encontrar una buena relación calidad-precio y viajar a lugares más cercanos. La incertidumbre provocada por la agresión rusa a Ucrania y otras tensiones geopolíticas en auge tampoco dejan de entrañar riesgos de empeoramiento.
Image Credits: Kristijan Arsov/Unsplash