Una Semana Santa de «sobresaliente» o, lo que es lo mismo, la de la definitiva recuperación. Ni las fechas tempranas en que han caído este año las primeras vacaciones de primavera ni las lluvias puntuales en algunas Comunidades, especialmente en el norte de España empañaron la afluencia de clientes a los campings de toda nuestra geografía. El balance, según las estimaciones del sector, es «extraordinario».
De hecho, la ocupación media a nivel nacional supera el 70 %, llegando en algunos establecimientos de la costa mediterránea al 90 %, sobre todo a partir del Jueves Santo. En las comunidades de interior, la ocupación alcanzó el 70% en Aragón, Navarra, Comunidad de Madrid, Castilla y León y Castilla-La Mancha, mientras que en las comunidades cantábricas ha estado entre el 50% y el 60%.
Si hablamos de tipo de alojamiento, los bungalows se confirman como la oferta más atractiva y de moda, con un «lleno total» en prácticamente todo el país. Reseñamos, además, la afluencia de campistas nacionales (más del 70 % llegando al 90 % en algunas regiones de interior).
«Estos datos son la recompensa a años de duro trabajo. Hemos sido uno de los sectores más perjudicados por la grave crisis pero, a pesar de ello, muchos empresarios han seguido realizando importantes inversiones y mejoras en infraestructuras, servicios y personal, con el único objetivo de posicionar a los cámpines en el sitio que se merecen y a la altura de los mejores de Europa», asegura la presidenta de FEEC, Ana Beriain.
